¿Estás frente a una oportunidad que parece muy buena para ser verdad o a punto de adquirir un producto para el que no tienes el dinero suficiente? ¡Ten cuidado! Puedes estar frente a malas decisiones financieras.

Cada elección en la vida, por pequeña que parezca tiene un efecto trascendental. Por ello, es relevante reflexionar en torno a nuestras decisiones y mantenernos atentos a las alertas que nos indican si estamos eligiendo el camino correcto.  

Ante este contexto, Baubap, plataforma de micropréstamos, nos comparte cinco red flags para identificar si estamos tomandouna mala decisión financiera:

1. Adquieres nuevas deudas para pagar las anteriores

Lo ideal es que cuando adquieras una deuda tengas un plan de pago bien estructurado. Así podrás saldarla sin inconvenientes. Ojo, si tienes que buscar un préstamo para pagar otro es probable que exista una falta de planeación financiera.

Antes de tomar una decisión apresurada y bajo la presión de una urgencia es importante verificar los intereses, plazos y el capital que tendrás disponible para saldar esta nueva deuda. De esta forma podrás crear un plan estructurado que no ponga en riesgo tus finanzas ni gastos básicos. Recuerda que lo ideal es vivir sin estrés financiero.

2. Compras sin dinero en mano

La mejor manera de asegurarte que estás realizando una compra inteligente es elaborar una pequeña investigación que te permita conocer las distintas opciones que hay en el mercado. Además, es indispensable que cuentes con el dinero suficiente para hacer ese gasto. Es por ello que, un gran indicador de que estás por tomar una decisión equivocada es no tener la liquidez suficiente para afrontar ese desembolso. Evita el «lo pago con la tarjeta y ya luego veo cómo le hago».

Recuerda que tus decisiones financieras deben ser tomadas única y exclusivamente con el dinero que tienes en ese momento. No te valgas del capital que «podría llegar en un futuro», sobre todo frente a aquellos casos que no representan una emergencia.

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3. La presión y desesperación se apoderan de ti

La mayoría de las veces, el éxito de una decisión depende en gran medida de la tranquilidad con la que se llevó a cabo. Dejarse llevar por el último día de rebajas o por la presión que alguien más ejerce sobre ti, son dos señales que indican que lo que estás por hacer no es la mejor opción. 

Analiza muy bien si realmente lo necesitas y qué representará esa compra en tu situación financiera. Las compras por impulso suelen ser de nuestras peores enemigas.

4. Compras o solicitas nuevos productos financieros sin conocer tu situación actual

Realizar una compra o solicitar un préstamo sin antes conocer el estado de tus finanzas puede comprometer tu salud financiera. Ello te llevaría a generar una nueva deuda cuyo pago puede complicarse, el famoso efecto bola de nieve.

Por ello, es importante que antes de realizar alguna compra o solicitar un nuevo producto financiero, comprendas bien tu punto de partida. Si ya tienes deudas, primero liquídalas, te ahorrarás muchos dolores de cabeza y canas verdes (como dicen las abuelitas).

5. Intentas justificar tus decisiones financieras

Sentir culpa y tratar de justificar tus compras es una gran red flag. “Me lo merezco”, “para eso trabajo”, “era una oportunidad única”, «es para consentirme» son solo algunas de las frases más comunes que usamos frente a una mala decisión financiera.

Recuerda que una compra inteligente nunca genera culpabilidad y es algo que por sí sola justifica la inversión realizada. Ojo, comprar gustos o lujos no está mal, siempre y cuando sea bien pensada, planeada y que no represente un riesgo para tus finanzas personales.

Sin duda, cada decisión que tomes representará un desafío para el cual debes estar preparado. No olvides que una decisión acertada tiene detrás una reflexión y tiempo suficiente de análisis que permita que te sientas cómodo con cada una de ellas.

¿Tú tienes alguna otra red flag? Si es así, déjala en los comentarios, me dará gusto leerte y, sobre todo, saber que ya tomas tus finanzas personales con más análisis.