En la industria de la tecnología, desde el siglo XIX, han sobresalido las mujeres innovadoras; la primera programadora informática fue Ava Lovelace, una mujer que tuvo educación en ciencias y matemáticas, lo que le permitió crear el primer lenguaje de programación, dando lugar a la primera computadora

Hoy en día las mujeres líderes tienen en común la motivación para generar un impacto positivo en las nuevas generaciones de estudiantes y trabajadoras. 

Algo que fortalece a nuestra sociedad es comenzar a reconocer las fortalezas, contribuciones y logros de las mujeres con la finalidad de cultivar el interés por la ciencia y la tecnología en las niñas y adolescentes.

Asimismo, para empoderarlas y aumentar sus oportunidades profesionales en un mundo impulsado por la digitalización, es fundamental el fortalecimiento de sus aptitudes técnicas y soft skills o habilidades blandas serán clave para que las mujeres sobresalgan.

En México, existe una fuerza laboral de medio millón de personas del sector tecnológico.  De este porcentaje, solo el 15.5% son mujeres y la mayor parte de ellas se dedican al desarrollo de software, mientras los hombres abarcan puestos como: directores en informática, desarrolladores, analistas de software, administradores de bases de datos y profesionales en comunicaciones y telecomunicaciones.

Conscientes de la falta de diversidad y los múltiples techos de cristal, la misión de la sociedad es crear el contexto adecuado que dé pie hacia la paridad de género en el país. Con esfuerzos en educación es posible construir esos caminos y hacer un cambio social y económico.

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Habilidades y campos por dominar

Si durante la posguerra en el Siglo XX la fuerza laboral tecnológica estaba compuesta en un 75% por mujeres, es posible imaginar un mundo más igualitario, donde el género no es una limitante, si no un activo valioso para la industria.

En estos tiempos, un ejemplo perfecto son 3 mujeres que son líderes en el manejo de la herramienta de la década, la Inteligencia Artificial:

  • Karine Perset. Dirige y supervisa la Unidad de Inteligencia Artificial de la División de Políticas de Economía Digital de la OCDE en materia de IA, se enfoca en políticas públicas para implementarla de forma ética y responsable.
  • Dra. Brandeis Marshall. Es especialista en ingeniería de datos, ciencia de datos, su organización DataedX fomenta el desarrollo de habilidades para que las personas y las organizaciones comprendan el uso de datos y las prácticas de datos responsables.
  • Sunita Grote. Es líder de Ventures dentro de la Oficina de Innovación de la UNICEF, con financiación inicial en monedas fiduciarias, criptomonedas y contribuye al descubrimiento, desarrollo y despliegue de bienes públicos digitales de código abierto.

Es momento de que cuando el mundo se refiera a que la Inteligencia Artificial es mujer, no solo debe considerar la voz femenina de una ayudante de voz. Esta década deberá destinar esfuerzos en reconocer a estas y otras profesionistas y expertas en IA.  

Si nos detenemos a conocer lo que las niñas, adolescentes y jóvenes adultas tienen para aportar en cuestiones de tecnología, estoy segura de que descubriríamos un sinfín de ideas creativas, innovadoras y ambiciosas, por ello estoy segura de que solo la educación podrá forjar un camino como mujeres líderes.

Este texto es una colaboración de Gabriela Martínez Morales, Rectora Institucional de UNITEC