En el marco del Día Internacional de la Mujer Emprendedora, revisemos los principales obstáculos a los que se enfrentan las mujeres que desean emprender en el mercado formal, así como las recomendaciones para romperlos.

El primero es la falta de acceso a financiamiento o a apoyos económicos para emprendedores. Estos apoyos son de gran importancia, ya que permiten a las personas emprendedoras planear de forma adecuada y tener un mejor desarrollo de su propuesta, logrando evitar el cierre parcial o definitivo de su negocio, sobre todo en los primeros años críticos de supervivencia de cualquier empresa.

La segunda dificultad es el costo elevado de trámites administrativos, es decir, cuando algunas mujeres comienzan a recibir ingresos extras, por ejemplo, con la venta de productos de catálogo, la gran mayoría opta por quedarse en la informalidad y no busca expandirse porque ello implicaría dedicar mucho tiempo y dinero en trámites para permisos y no les garantiza mayores ganancias.

Un estudio del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) aconseja que a las mujeres emprendedoras les convendría más operar en la formalidad, ya que obtendrían mayores beneficios y mejores opciones de financiamiento, incluso, ingresar a nuevos mercados, lo cual se reflejaría en mayores ingresos.

El tercer gran impedimento a superar es la falta de información y acceso al ecosistema emprendedor, esto puede ser un factor por el que 54% de las mujeres emprendedoras en Latinoamérica ha recaído en la economía informal, de acuerdo con la ONU Mujeres. Esto también provoca que las empresas fundadas por mujeres sean de menor tamaño en comparación a las lideradas por hombres.

Consejos para romper con los retos del emprendimiento

  1. La capacitación es importante
    Antes de iniciar un negocio, es ideal que inviertas tiempo en capacitarte en temas relacionados con el marketing, operaciones o proceso de fabricación de productos; servicios; habilidades financieras y ventas; esto te permitirá generar nuevas ideas y mejorar la toma de decisiones. Existen algunas universidades que ofrecen cursos en línea a un bajo costo o hasta gratuitos.
  2. Conoce tu mercado
    Cuando se te ocurre una idea crees que cambiará al mundo, sin embargo, lo recomendable es que primero inviertas en estudios de mercado, esto te ayudará a analizar las necesidades y deseos de tus clientes potenciales, además de conocer quiénes serían tu competencia. Estos estudios también podrían servirte para descubrir alguna área de oportunidad para mejorar en ese mercado.
  3. Arma tu plan de negocio
    El siguiente paso es hacer un plan del proyecto; se trata de una herramienta imprescindible que determinará si es viable o no, además de ayudarte a establecer metas y una ruta de resultados esperados. En muchos de los diplomados sobre emprendimiento que mencionamos anteriormente te enseñan sobre cómo trabajar estos planes de negocio.
  4. ¿Y si no tengo dinero para emprender?
    Sabemos que muchas veces lo más difícil para comenzar un negocio es la falta de capital o financiamiento, cuando busques un crédito en algún banco, fondeadora o inversionistas, el plan de negocio te ayudará a saber cuánto dinero necesitas y para qué destinarás cada peso. Recuerda que existen programas gubernamentales como el programa “Financiamiento para Mujeres Emprendedoras y Empresarias” de la CDMX y créditos de bancos exclusivos para mujeres emprendedoras, los requisitos se encuentran en sus páginas de internet.
  5. Usa la tecnología a tu favor.
    En la actualidad, para que cualquier negocio se destaque, debe contar con su propio sitio web o buscar sitios donde puedas anunciar y dar a conocer tu producto. Asimismo, tendrás que actualizarte en los diferentes tipos de pagos existentes, es decir, los medios de pagos electrónicos te permitirán acceder a mas clientes.

Fuente: Revista Condusef